Hoy nos despertamos temprano para despedir a Pati, pero luego entre una cosa y otra se pasó el tiempo y terminamos saliendo tarde. Como siempre. Decidimos no odiarnos tanto y usar el metro, lo cual fue complicado porque ninguno tenía sencillo y tuvimos que hacer una cola de setenta personas (al menos yo la hice, ellos resolvieron como comprar los boletos) mi hermana y mi mamá no dejaban de quejarse de lo feo que es el metro de Roma (para mi se parece al de ccs) pero preferían estar ahí que cruzando la ciudad a pie. Nos bajamos en la estación ottaviano y buscamos la vía principal para llegar al Vaticano de frente y que la vista de la basílica fuera la mejor. Hacia un sol para morir incinerado, pero al menos era un buen día para estar al aire libre.
Es tan majestuoso como lo fue la primera vez que lo vi. Me encanta llegarle por la vía principal, simplemente te quita el aliento. Caminamos hasta la plaza san pedro y mi hermana y yo nos metimos en la cola para entrar a la basílica mientras mis padres y mi primo iban a buscar entradas para la misa del domingo (una misa especial, al parecer) Anto y yo nos estábamos achicharrando bajo el sol, jugábamos a ponernos como árabes y la enorme cola avanzaba demasiado rápido. Tanto que antes de lo previsto estábamos al frente y mis padres no llegaban. Así que dejamos pasar a la gente y esperamos, esperamos, esperamos... Para cuando ellos aparecieron pudimos haber hecho la cola otra vez. Pero en fin. Entramos.
Es una iglesia impresionante, la primera vez que vine me pareció que a los romanos les gustaba todo grande y sigo creyendolo fervientemente. Mi mamá, que es una católica empedernida, se puso a rezar en cada banco que veía. En el segundo, mi primo, mi hermana y yo nos aburrimos y mi papá dijo que fuéramos a nuestro ritmo y nos viéramos en la cúpula (al principio me opuse, siempre es mala idea separarse cuando no te puedes comunicar, pero mi mamá se tardaba mucho y hay que aprovechar el tiempo)
Así que nos fuimos y vimos la capilla en todo su esplendor, nos acercabamos a los tours y traduciamos lo que decían para ir entendiendo que veíamos (mi primo los de italiano y yo los de inglés). Fue divertido (me recordó que ayer en el coliseo hice lo mismo pero en voz alta hacia mi familia y la guía me miró odio). Pudimos ver el enorme altar de cerca, justo antes que lo cerraran (¡ha!), vimos la tablita con los nombres de todos los papas, entramos a la tienda del pequeño museo que hay dentro (dónde el chico que atendía era que si mi futuro marido, demasiado bello en la vida, incluso después que salí regresé a tomarme una foto con él porque I mean tenía que hacerlo) terminamos saliendo de la iglesia y no vimos la gruta hacia las tumbas de los papas, así que le preguntamos a un policía y nos explicó dónde y tuvimos que volver a entrar y ver que la puerta está que si escondidisisisisima.
Pero es genial bajar a ver y alejarse del desastre que hay arriba (por cierto, ya subieron a Juan Pablo II) con eso dimos terminada la visita a la basílica, así que nos encaminamos a la cúpula, lo cual suponía otra cola. No había casi gente así que llegamos rápido, solo para ver que no aceptaban tarjeta, sino efectivo. Y yo no tenía efectivo porque mis padres lo tenían. Así que nos salimos de la cola y fue todo un show porque íbamos a subir en ascensor pero sólo nos alcanzaba la plata (y a penas) para subir por las escaleras y eran casi 600 y no sabíamos si ellos habían subido o no y era terrible pues. Terminamos subiendo, arriesgando unos 15€ que no volverán; si van, paguen el ascensor, LAS ESCALERAS SON LA MUERTE pero con mi hermana y mi primo fue demasiado divertido y canson, pero divertido al fin. Hubo momentos donde pensabas que no ibas a llegar o que las piernas te dicen que no llegaran, pero eventualmente lo hicimos y llegamos a la cúpula como unos cerdos sudados.
Y mis padres ni siquiera estaban hay. Dimos una vuelta de reconocimiento y nada. Disfrutamos de las buenas vistas y el mal olor de algunos, pero mis padres no estaban por ningún lado. Esperamos allí 40minutos y luego bajamos, como es un camino estrecho nos íbamos tomando selfies para tapar el paso y molestar a otros turistas. Solo porque podíamos pues. Al descender mi papá llamó a mi primo (cosa que yo había pensado, pero que debió salir bien caro) y le dijo que estaban afuera de la iglesia. Así que corrimos por las escaleras y los encontramos justo abajo mientras la guardia suiza hacia su cambio de guardia. Todo muy a tiempo.
Como ya no daba tiempo de ir a los museos, nos fuimos a comer por ahí cerca (muy buena la comida) y luego nos fuimos hasta el Castillo Sant Angello, que de noche es hermoso (aunque el puente de los ángeles está muy descuidado y feo) y nos quedamos junto al río Tevere un rato, luego seguimos caminando hasta la piazza spagna dónde nos sentamos en las escaleras, vimos la fuente, todas las tiendas que hay alrededor y todo despacio. Luego caminamos hasta la piazza del popolo y es enoooooorme y ya no tenía batería así que no hay fotos, pero es inmensa y mucho más vacía que la spagna (claro que esta es famosa por las tiendas y nadie se resiste a eso) ya estábamos medio muertos del cansancio así que regresamos tranquilamente al hotel.
PD: media roma está en restauración, así que hay andamios en todos lados.
PD2: había unas chicas vestidas de la Roma que vendían los tickets para el juego. Pero sólo le preguntaban a los hombres. Que sexista.
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