7 sept 2011

Es septiembre y te extraño

Me anoté tu número de teléfono en la mano, pero ese día llovió.
Recordé cada facción de tu rostro, pero el tiempo las borró.
Intenté recordar tu nombre, ese que nunca dijiste, pero simplemente no surgió.

¿Es que el cruel destino se encargó de juntarnos tan solo una vez para luego no hacerlo jamás? He escuchado de historias que tienen que terminar para comenzar. ¿O es que a caso simplemente se encargó de enseñarnos que cada momento es único e irrepetible y que si no haces algo, no vuelven más? También hay historias que solo van de un encuentro, un único encuentro.

Han pasado tres años desde aquel día que te vi, tres años y aun recuerdo la fecha, esa hora, ese momento que me brindó días de sueños y noches de pesadillas, pensando en como verías otra cara femenina que no era la mía.

A falta de un nombre, te bauticé; a falta de conocer tu personalidad, la imaginé; a falta de momentos contigo, recreé el único compartido. A falta de tu presencia, te olvidé.

¡Ay! Como quisiera que esto último fuera verdad, que fueras tan solo una reproducción sistemática de mis neuronas al interactuar. Pero no. Tu recuerdo, tan viejo y a la vez tan nuevo, tan tormentoso y a la vez tan calmo, tan dulce y a la vez tan agrio; como lo amo y como lo odio.

Si te voy a decir la verdad - como siempre lo hago, debo agregar - es que ahora comprendo, solo en mi mente estás, que ya no te quiero conocer porque podrías no ser como te he ideado y arruinar esa imagen tan perfecta que de ti he creado. Antes pedía que me decepcionaras para jamás recordarte, ahora te pido que no lo hagas, que ni siquiera aparezcas, para siempre recordarte.

Mi imagen de ti -mi nueva imagen de ti, debo admitir- es de un amigo, el más hermoso de los amigos; que surge siempre en el momento oportuno, brindando consejos, apoyo e incluso regaños. Cada vez que te evoco sonrío, porque eres la imagen que yo tengo de imperfección ¡No me malinterpretes! Es solo una expresión, puesto que lo perfecto no existe, el concepto de imperfección me pareció adecuado para nada más real que tu. Tu imperfecto cabello castaño claro, tu imperfecta sonrisa de dientes blancos, tus imperfectos ojos azules como el cielo de verano.

Se que aún no es nuestro aniversario, pero en estos días, tan nostálgicos para mi, no he dejado de pensar en ti, aunque siempre estás presente, durante estos días has agobiado mi mente.

Espero algún día leas esto, todo esto, Ángel.

La muerte y yo

Desde hace como un mes, he leído una cierta cantidad de libros que terminan en la muerte, el/la protagonista muere o alguien muy cercano a ellos lo hace, esto me puso a pensar ¿Que pasará el día en que yo muera? Y deduje algo así:

Mi profesora de ballet estará increíblemente molesta porque falté al ensayo, un tanto preocupada porque sabe lo que responsable que soy.
Mi profesor de inglés se preguntará por que falté a clases de nuevo y si algún día terminaré con el curso avanzado.
Las chicas de la universidad se cuestionarán por que no envié los puntos para el trabajo.
Mi mejor amiga se frikeará por que no le contesté el mensaje que me habría enviado.
El chico que se empeñó en quererme pensará en que podre estar haciendo como para no responderle la nota de voz que me envió.
Ese amigo con el que iba hablando por el celular se dirá "que extraño que dejará de responder".
Mi tía llegará a su casa y verá que nada está recogido, quizás revise su calendario a ver si era viernes y me he ido.
Mi papá no conseguirá con que le atienda la llamada nocturna para ver como me fue en el día.
Y mi mamá estará tan preocupada por que jamás le avisé si había llegado a casa o no.

Todos se harán preguntas y yo seré la única con respuestas, respuestas que jamás serán pronunciadas, pero que todos conocerán eventualmente. Y entonces mi historia acabará, dejando un montón de conversaciones sin terminar, un poco de citas a las cuales no asistiré y muchos corazones en los cuales no viviré de la misma manera.

Verán, la muerte es mi más profundo y oscuro miedo -claro, también le temo a los dentistas y a las inyecciones y un montón de cosas más, pero eso no viene al caso- es un misterio tan grande y uno que a ciencia cierta no se resolverá, que me hace conjeturar sobre todo lo posible que pasará ese días. Quizás nada de lo que escribí se cumpla, quizás realmente nadie se pregunté esas cosas sino que piensen que me fui a vivir la vida loca, pero me gusta pensarlo de esa forma.

Siempre pensé en la vida como una novela, cada quien protagoniza la suya pero eso no impide que los personajes entrelacen las historias, y aun si el protagonista muere, todos siguen adelante, con sus vidas, porque nadie es indispensable en esta vida. Mi profesora de ballet anulará mi acto y mis apariciones, mi profesor de inglés cancelará un lugar en la graduación, mis amigas en la universidad aprenderán a aplicar las APA, el chico que me quería encontrará a un amor que le corresponda, mi mejor amiga seguirá adelante, encontrando en quién más depositar toda su confianza, mis padres se quedarán con un vacío que nadie podrá llenar, pero tendrán a mi hermana para que los llene de orgullo y gozo.

Y solo entonces yo seré polvo, un recuerdo amistoso -quizá un tanto doloroso- pero grato, seré una foto o un cuadro, una sonrisa por ver la luna, una lágrima por ver la lluvia.


PD: El post resultó ser más lúgubre de lo que pensé que saldría, mis disculpas xD por cierto, no es que piense morir pronto o algo por el estilo -créanme, quiero vivir tantos años como a este cuerpo humano le sea posible- pero esta es la vida que conozco y de la única que puedo hablar x)